jueves, noviembre 06, 2008

LA SOLIDARIDAD DE LUTO


El día sábado, pasadas las 20 horas, en el barrio porteño de Barracas las sirenas inquietaban a los vecinos. Bomberos de los cuarteles voluntarios de La Boca y Vuelta de Rocha, así como sus pares de la Policía Federal acudían a un incendio producido en cercanías de la mística cancha de Boca. El incendio se habría originado en un depósito de gomas, el cual, durante el combate del fuego sucumbió al poder incesante del ogro naranja, dejando sepultados a 3 bomberos. Carlos Guevara, de 44 años no pudo alcanzar la gloria en la tierra y Dios quiso que forme parte de su cuartel de ángeles en el cielo. Mientras tanto José Nardulli y Alicia Romero sufrieron heridas diversas, por lo cual debieron ser internados para cuidados intensivos.
Carlos Guevara fue un héroe, que duró en la tapa de los diarios y los noticiosos sólo un día, el domingo. Con el despertar del alba y mientras sus compañeros seguían combatiendo el fuego los portales de Internet y los noticieros no hablaban de otra cosa que del Héroe fallecido. Uno de los voceros decía que en los 70 años que lleva el cuartel es el primer bombero fallecido.
El lunes, día laboral para la mayoría y donde los resúmenes de noticias cuentan lo más importante que sucedió durante el fin de semana todos, y digo todos se hicieron eco del casamiento de Flor de la V. El bombero fallecido ya era historia. Para el mundo, para los dirigentes, para los políticos, pero no para sus familiares, amigos y compañeros.
Ojala algún día estos héroes anónimos tengan el reconocimiento que se merecen.
Ahora su viuda quedará con una pobre pensión que le dará el estado por el fallecimiento de un noble “Caballero del Fuego” que dio su vida por salvar la de los otros sin pedir nada a cambio. Por ahora, sólo Dios lo reconocerá por todo lo que hizo en su vida.

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